Es el punto más alto de la península de O Grove, lo que lo convierte en un extraordinario mirador de la ría de Arousa y el Océano Atlántico.
Desde allí veremos a nuestros pies las islas atlánticas, la lengua de arena que une la antigua isla de O Grove con el vecino municipio de Sanxenxo, la rica ensenada de O Vao y la playa de A Lanzada.